La Iglesia en Cuba enfrenta graves daños materiales y una crisis humanitaria creciente. Ayuda a sostener la esperanza y acompaña a quienes hoy más lo necesitan.
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Una emergencia que golpea el corazón de Cuba.
El paso del potente huracán ha dejado a su paso una catástrofe de enormes proporciones en la región oriental de Cuba.
Según la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (COCC), cientos de miles de personas se han visto gravemente afectadas: numerosas viviendas y templos destruidos, familias que lo han perdido todo y comunidades sin acceso a bienes básicos ni electricidad.
La crisis se agrava con la escasez de alimentos, la inestabilidad económica y la propagación de enfermedades transmitidas por mosquitos, que se multiplican con las lluvias.
“La situación en la zona oriental es muy crítica. Hay lugares totalmente devastados”, señaló Mons. Arturo, presidente de la Conferencia Episcopal de Cuba.
“Cuando todo parece perdido, la caridad cristiana se convierte en la presencia de Cristo entre los más pobres.”
Papa Francisco
Fe y Resistencia en Medio del Dolor
El Santuario de la Virgen del Cobre también fue afectado
Incluso el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, símbolo de esperanza del pueblo cubano, ha sufrido graves daños en puertas, ventanas y vitrales.
A pesar de las pérdidas materiales, la fe del pueblo se mantiene firme.
“Gracias por la preocupación y por sus oraciones. Hasta ahora no tenemos que lamentar víctimas humanas, gracias a Dios. Sigan rezando. Dios los bendiga”, expresó la Iglesia en Cuba.
ACN reafirma su compromiso con la Iglesia en Cuba
Desde hace décadas, Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) apoya a la Iglesia cubana en su misión pastoral y social. En este nuevo momento de dolor, ACN Perú invita a todos sus benefactores y amigos a unirse en oración y solidaridad con nuestros hermanos cubanos.
Que la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, fortalezca la esperanza de quienes hoy sufren.
