Mons. Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, cumple su primer mes en arresto domiciliario sin conocerse si habrá juicio contra él.

ACN.- La policía impidió la procesión de San Miguel en la iglesia homónima de la ciudad de Masaya el pasado lunes. El gobierno de Ortega ha aumentado su presión contra la Iglesia católica con este gesto, argumentando «razones de seguridad pública». El jefe de policía de la ciudad se había personado en el templo un día antes de la procesión para advertir de que la imagen no podía salir de la iglesia.

En un comunicado de la Archidióceiss de Managua, se dio a conocer “que la Policía Nacional de la ciudad de Masaya ha informado a las Cofradías y Párrocos de las Parroquias de San Miguel Arcángel y San Jerónimo, que por razones de seguridad pública no estarán permitidas las procesiones en las festividades respectivas de esa ciudad”.

La Iglesia católica de Managua invitaba “a los devotos y promesantes de los santos patronos, a tener presente que la fe y devoción son un tesoro que llevamos en el corazón y desde ahí podemos dar el homenaje debido con la fuerza de esa herencia ancestral en nuestras comunidades”.

“Las misas, novenarios y celebraciones litúrgicas propias de ambas festividades se realizarán según el programa de cada una de las parroquias en los templos respectivos”, precisa el comunicado.

Otras procesiones prohibidas

No es la primera vez que el gobierno de Nicaragua prohíbe una procesión de la Iglesia Católica. Ya lo hizo en agosto cuando ordenó que no se realizara la de la Virgen de Fátima en el marco del Congreso Mariano.

La Parroquia San Miguel Arcángel en Masaya ya ha sido antes blanco de la dictadura. En 2018 grupos paramilitares afines a Daniel Ortega atacaron a la población y en 2019 un grupo de madres y el P. Edwing Román hicieron una huelga de hambre en protesta por la arremetida de la policía orteguista contra la Iglesia y la población del lugar.

Mons. Álvarez, un mes en arresto domiciliario

El 15 de septiembre el Parlamento Europeo aprobó por 538 votos a favor y 16 en contra, una resolución en la que exige la inmediata liberación de Mons. Rolando Álvarez, Obispo de Matagalpa, arrestado por la policía nicaragënse el pasado 19 de agosto, junto a un grupo de sacerdotes y colaboradores. Desde entonces el prelado es encuentra en arresto domiciliario sin conocerse se habrá un jucio contra él. Sí ha trascendido que los arrestados están siendo investigados penalmente por incitación al odio y a la violencia tratando de desestabilizar al Estado.

La situación del obispo de Matagalpa se une a la expulsión del nuncio Waldemar Stanislaw Sommertag el pasado 12 de marzo, la salida de las Misioneras de la Caridad de la Madre Teresa de Calcuta y otros religiosos o sacerdotes, el cierre de medios católicos. El papa Francisco ha hecho en ocasiones un llamamiento al diálogo para superar la crisis social.

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